Hoy es Navidad y se acaba el 2020 ¡yuuupiiiii!

Todo son buenas noticias😬. Ha sido un año intensito, a un nivel Dioses del Olimpo, y para los de Fento inolvidable en todos los sentidos, y es que decidir poner un proyecto en marcha lleno de ilusiones e incertidumbres, está siendo todo un reto.

Permite que me ponga un poco sentimentaloide, espero que no te importe, para contarte la historia de hoy, porque esto va de aeropuertos y de viajeros.

A lo largo de mi vida me ha tocado vivir en un montón de sitios y con el tiempo descubrí que uno de mis lugares favoritos eran los aeropuertos. Sí , sé que puede sonar raro pero es ese sitio donde me dan ganas de sacar las pantuflas y estirar las piernas. Todo el mundo está de paso, vienen de todas partes y eso siempre me ha dado una felicidad difícil de explicar. La gran ventaja de esto es que siempre hay un lugar en cualquier ciudad del mundo donde puedo sentirme en casa.

Cuando decidimos crear Fento no me podía imaginar que acabaría convirtiéndose en uno de los aeropuertos donde tanto me gusta estar. En estos poquitos meses de despegues y aterrizajes, nos hemos encontrado viajer@s maravillos@s, todos tomando aviones diferentes pero embarcando en el mismo sitio y hoy quiero deciros que sois estupend@s y no podemos estar más felices. Gracias infinitas por formar parte de esta familia Diego, David, Raquel, Ángela, @wallyta20,  @ifdezglez,  @lado_maria,  @lucialdao,  @lidia_folgar, Pablo, Darío,  @zapatostes y
@angel__el_bily

Nos queda mucho camino, pero el proceso está siendo lo más bonito del mundo y eso es gracias a vosotr@s. Os queremos familia Fento.